Extractado de Albert Carreras, catedrático de Historia económica de la
Universidad de Barcelona, en un trabajo de título no menos elocuente:”
Cataluña, primera región industrial de España y “Una visió a llarg termini de
la industrializació catalana”, Revista Econòmica de Catalunya, nº 4, 1987, pp.
65-74.) en Pautas regionales de la
industrialización española, Ed. Jordi Nadal y Albert Carreras, Ariel,
Barcelona 1990
Bases manufactureras del despegue fabril de Cataluña en el
siglo XVIII.
“La Cataluña del siglo XVIII aprovechó las oportunidades del
acceso libre al mercado español” En este sentido “Una de las consecuencias de
las consecuencias de la guerra de Sucesión fue la supresión de las aduanas
interiores entre Aragón y Castilla (Y dentro de Aragón)..y el comercio entre
ambas coronas resultó así mucho más fácil...”cosa que utilizaron los
fabricantes de textil catalán para expandirse en el mercado español en el siglo
XVIII.
Se produjo una diáspora comercial: aprovechaban a fondo las
ventajas de ser considerados extranjeros (ppor su lengua y por sus costumbres,
siendo legalmente nacionales. Su solidaridad, su endogamia, su confianza mutua,
les ayudaba a penetrar comercialmente en un medio hostil pero en el que tenían
plena igualdad de derechos. “
A partir de 1779, la liberalización del comercio con América
por todos los puertos de la Corona española, supuso el acceso de los
manufactureros catalanes al comercio colonial español. Esto trajo consigo un “espectacular
desarrollo del negocio naviero” (En este aspecto, el caso catalánny el caso
vasco corren bastante en paralelo), que se hicieron con una parte fundamental de
los fletes con la colonias. “A la larga ello supuso un beneficio sustancial
para la economía catalana, concretado en la exportación de servicios que
engrosarían la cuenta activa de la balanza de pagos catalana y, por
consiguiente, facilitarían su capacidad de crecimiento. …”
Obsérvese que el desarrollo catalán [tras la Guerra de
Sucesión en el siglo XVIII] hinca sus raíces en las oportunidades comerciales –insisto:
comerciales (lo que Pierre Vilar denominaba “el cambio en el modo de producción”)
– abiertas hacia Castilla, hacia el Norte de Europa y hacia la América
colonial; que todas ellas aumentaron el ingreso per cápita en el Principado y
que generaron un crecimiento bastante equilibrado de los sectores
agrario[gracias a una mejor estructura de la propiedad fruto de la Sentencia de
Guadalupe del siglo XV, por la que Fernando el católico impuso el fin de los “malos
usos” feudales], manufacturero y comercial.
Cataluña en la Crisis del Antiguo Régimen.
El primer tercio del siglo XIX fue muy difícil, Guerra con
Inglaterra, guerra con la Convención, Invasión napoleónica, breve periodo
liberal y vuelta al Absolutismo y Primera Guerra Carlista. A pesar de todo
ello, el comercio catalán no desapareció sino que se transformó. A cambio de la
exportación de aguardiente catalán a las colonias se repatriaba azúcar, que “se
vendía desde Barcelona al resto de España y también a otros muchospuertos del
Mediterráneo”. “La expansión de la economía azucarera de la Cuba colonial
ofrecía también otra oportunidad muy atractiva para los navieros catalanes (Y
también vascos), el tráfico de esclavos…hasta aproximadamente 1860. Los
historiadores de la economía han probado que: “Los beneficios extraordinario
del tráfico negrero compensaron –o mas que compensaron- la interrupción de las
líneas de negocio tradicionales del siglo XVIII (una tesis que lo demuetra, la
de la historiadora bilbaína Nadia Fernández de Pinedo).
La revolución industrial en Cataluña
En este contexto se produjo una acumulación de capital que
permitió la Revolución Industrial en Cataluña de la mano del sector algodonero
a mediados del siglo XIX.A ello también contribuyeron, cambios en la
legislación española como el Código de Comercio, la suavización del rigor
absolutista.Tras la Primera Guerra Carlista, que llega a entorpecer seriamente
este progreso, entre 1841 y 1857 se crearon en la provincia de Barcelona
sociedades con un capital invertido superior a los 100 millones de pesetas.
Hacia 1860 el tamaño y la modernidad de la industria
catalana, dentro del reino de España, eran absolutamente respetables en
términos europeos. …La década de 1870 fue una nueva etapa de fuerte crecimiento
industrial enCataluña, en un contexto de progresivo desarme arancelario. El
protagonismo principal corrióa cargo de la industria algodonera que con “la
conquista total del mercado español” y, como explica Jordi Nadal, al socaire
del sector algodonero, crecen la totalidad de los sectores textiles. “Cataluña
se convierte, gracias al atractivo de las grandes economías externas que puede
ofrecer a los industriales textiles de toda España, en la tierra prometida
donde instalar fábricas modernas dedicadas al rabajo de la lana, del lino, la
seda y las llamadas fibras duras, esparto, etc.
El siglo XX
Hacia 1900 en Cataluña se
concentraba más de la mitad de la capacidad productiva española en todas y cada
una de estas especialidades.
Para potenciar este florecimiento vinieron los aranceles
proteccionistas de 1891 y 1906 . El Estado español favoreció con ellos el
surgimiento de nuevos sectores, y ya no sólo en el textil. Por el contrario el
fin de siglo coinció con la crisis final de las colonias españolas, muy
perjudicial para la industria catalana. Y origen de la reflexión de buena parte
de la burguesía catalana de que el Estado español, muy débil, y atrasado no
podía ni proporcionar un mercado adecuado a sus expectativas, ni proporcionarle
protección en el mercado internacional (…)
Y en este contexto surgió con fuerza el nacionalismo catalán
de inspiración claramente burguesa, mientras las masas proletarias y agrarias
estaban mayoritariamente en manos de anarquistas y carlistas, respectivamente .
Pese a ello, la electrificación y la inversión en material de trasnporte,
supuso un leve crecimiento hasta la Primera Guerra Mundial. Esta supuso una
oportunidad de oro para la sustitución de importaciones e incluso posibilidades de exportaciópn de
uniformes , mantas, botas, etc. al ejército francés…que van a aprovechar los
industriales y comerciales catalanes. También aumentó la capacidad adquisitiva
en el mercado interior español, que volvió a ser protegido con nuevos aranceles
tras la guerra mundial.
Todo ello crea una estructura industrial que va a perdurar
hasta la guerra civil de 1936. Esta acarreó una drástica contracción de la
demanda del mercado interior y las posibilidades de exportar eran nulas, aunque
continuaron exportando algo a ..Canarias, y los territorios bajo protectorado
español del Norte de África…
La recuperación del consumo privado interior español en la década de 1950 reactivó algo la demanda,
pero se sintió la competencia de las fibras sintéticas que llegaban de Europa y
Asia. El plan de Estabilización de 1959 y el nuevo arancel liberalizador, abocaron
al sector textil catalán a una nueva crisis en un primer momento pero el
crecimiento de la demanda interna, y a la posibilidad de adquirir nuevas
tecnologías en el extranjero, de nuevo vino a socorrerlo…
Al final del franquismo, la industria catalana entró en
crisis, como el resto de la economía española. La Cataluña de izquierdas fue la
vanguardia de España en los primeros compases de la Transición española; el
proceso de la constitución, la integración en Europa de España se hizo ya bajo
la égida pujolista, significó el reflotamiento de Catalunya, reforzado por la
Olimpiada de Barcelona de 1992…En la actualidad se falsean las relaciones.
Cataluña como región históricamente industrializada de España, ha sido
vanguardia de España, en su apertura al exterior, en su movimiento obrero y
social.
Se puede discutir sobre lo que antecede pero me entristece enormemente que ahora una parte de los catalanes, que han sido y son vanguardia de España en tantas cosas, a instancias de unos políticos que desconocen la historia o la manipulan mediante historiadores orgánicos, caiga en el ombliguismo,
en las solidaridades horizontales detrás de una entelequia, detrás de un pretendido "derecho a decidir", un "estado catalán"
que sólo tapa el fracaso actual de las élites neoliberales en la resolución de
los problemas. ¿Qué Estado catalán si al día siguiente privatizarán hasta la
senyera?
Textos que se pueden consultar:
Jaume Vicens Vives y Monserrat Llorens: Industrials y politics del segle XIX, Vicens-Vives, Barcelona, 1958
Josep Fontana “Nacimiento del proletariado industrial y
primeras etapas del movimiento obrero” en Cambio
económico y actitudes políticas en la España del siglo XIX, Ariel,
Barcelona, 1973
Miquel Izard, Industrialización
y obrerismo. Las “Tres clases de Vapor”,
1869-1913, Ariel, Barcelona, 1973
Jordi Maluquer de Motes, La
crisis del modelo liberal en España: movimiento obrero y pensamiento socialista,
tesis doctoral, Barcelona, 1975
Ernest Lluch : El
pensament econòmic a Catalunya, 1760-1840, Barcelona, 1973
Pierre Vilar: Catalunya dins l’Espanya Moderna. Recerques sobre els fonaments econòmics de
les estructures nacionals, Barcelona 1964