El Relato y el co-relato.
El nacionalismo tiene su relato y
su correlato que se resume en la siguiente tesis: ahora que los descarriados
chicos de ETA, han abandonado a lucha armada, y desde nuestra posición de
centralidad y bajo el patriarcado de Sabino Arana hay que impulsar el nuevo
Raca-raca de un nuevo Estatuto…con los arrepentidos que Dios quiere y los
integradores en nuestra nebulosa a los que Dios Padre adora…
A este relato, habría que
oponerle otros relato, emotivo, racional, mental, imaginario, pedagógico y
económico y fiscal, que se resume en los siguientes puntos:
1. A lo largo de la historia de
los últimos doscientos años, a los vascos no se les ha dejado integrarnos en
una verdadera República unitaria de ciudadanos españoles, cuerpo al que
pertenecemos desde la Edad Media, a través de los antiguos reinos de Navarra y
Castilla y sus Señoríos de Vizcaya, Tierra de Álava y Noble y Leal, Provincia
de Guipúzcoa, que tuvieron en ellos sus fueros como cesión de su soberanía
unitaria.
2. Cuando se conformaron las
Repúblicas y las monarquías constitucionales, los Españoles sufrimos múltiples
impedimentos a la constitución de la nuestra: La Invasión napoleónica, desató
la primera constitución unitaria de 1812; luego vinieron las de 1836, 1848,
1868, 1876…Todas ellas bajo el signo de la debilidad de la burguesía liberal
para imponerse frente a la antigua nobleza de las manos muertas y el legitimismo
carlista. La Primera República fue un episodio fracasado en buena medida por su
federalismo que fragmentaba aún más a las débiles fuerzas progresistas y que no
contó con las regiones o cantones a los que dio protagonismo, frente a la feroz
respuesta del clero y del carlismo y demás monárquicos.
3. Cuando a fines del XIX y
principios del XX el anarquismo y el socialismo, en sus diferentes versiones
van tomando fuerza, la burguesía fraguó una alianza de hierro con el resto de
la Oligarquía en lo que se llamó significativamente La Restauración Borbónica.
Se perdieron las últimas colonias y aumentó la desafección de las burguesías
periféricas, especialmente de la catalana y la vasca, que veían que sus
intereses mercantiles no podrían prosperar en el débil mercado interior
español.
4. A ésta le sucedió la dictadura
de Primo de Rivera, nuevo intento de modernización sobre bases oligárquicas y
sus epígonos de la Dictablanda, etc. Tras de lo cual llegó la Segunda
República, que trabajo sobre un país enormemente atrasado y débil impulsando
sobre todo la Educación del Pueblo mediante la creación de miles de escuelas y
de misiones pedagógicas. Pero desde el mismo 1931, las fuerzas reaccionarias,
la oligarquía, el clero y los militares refractarios, conspiraron contra esos
impulsos de Libertad y finalmente plantearon la dialéctica de las pistolas y
del genocidio de una guerra civil que se planteó para desterrar de España a “la
otra España”. Durante la República, se afrontó además los llamados “problema
vasco” y “problema catalán” que detrajeron tiempo y esfuerzo para realizar unas
labores de modernización que debieron haber contado con un apoyo más unitario.
5. Luego llegaron 40 años de
erial cultural, de erradicación de los avances en materia pedagógica y
educativa que planteaba la II República. La Represión fue absoluta y brutal,
los mejores españoles fueron muertos, presos o exiliados. Luego surgió toda una
generación sin memoria, que constituyó la sociología del franquismo, educada
entre su simbología y sus consignas en el nacional-catolicismo. El
desarrollismo desde los 60 y 70 contribuyó al progreso material pero no al
espiritual, cultural y político. Produciéndose expresiones de violencia reflejo
de la violencia del Estado franquista a su imagen y semejanza. La cultura en
España discurría en las catacumbas de la infracensura o en la de los
desterrados y clandestinos.
6. A mediados de los 70, las
fuerzas que habían plantado cara al franquismo continuaban siendo una exigua
minoría a pesar del activismo de muchos de sus militantes. Y fueron incapaces
de forzar una ruptura, ni tan siquiera una vez que el dictador murió en la
Cama. Hubo que pactarse un borrón y cuenta nueva con las hegemónicas fuerzas
del régimen, que al tiempo darían el testigo a una tibia socialdemocracia
modernizadora auspiciada por la socialdemocracia alemana, la más atlantista y
por los EE.UU. que trabajaban desde tiempo atrás en las cloacas de los grupúsculos
de extrema izquierda, fomentando atentados y acciones que dificultasen el fortalecimiento de un
Partido Comunista fuerte como en Italia.
7. Por otra parte, en este
escenario, la ETA había tomado protagonismo desde el 1970, con el Proceso de
Burgos y posteriores actuaciones. La rápida secularización del país Vasco,
aceleró también la desafección de los carlistas, ambos pilares del Régimen.
Esto produjo un proceso de alquimia que
provocó la hibridación de estos ex seminaristas y estudiantes cristianos
nacionalistas y carlistas con un marxismo leninismo de catecismo, muy
influenciado por los movimientos de liberación nacional que en los años 50 y 60
se imponían en África y Asia, el Caribe y América del Sur. La historia
posterior ya la conocemos: acción, reacción, condiciones políticas siempre bajo
la amenaza de las armas, terrorismo, cloacas del Estado, y víctimas, centenares
de víctimas y una sociedad, la vasca terriblemente fracturada y plural,
exiliada interior y exteriormente y traumatizada…
8. En consecuencia, al País
Vasco, nunca ha registrado en 200 años una paz real, una convivencia en paz,
salvo paréntesis de crecimiento económico que se trasladaba a una aparente
normalidad.
9. Los nacionalistas ahora
vuelven con el Raca Raca de la necesidad de un nuevo Estatuto político, porque
nunca han estado agusto con el que tenemos. Y porque pretenden una nueva vuelta
de tuerca, apoyados en la acumulación de fuerzas y de “legitimidad”, con la
aparente pacificación de su ala extrema y violenta. Pero la trampa estriba en
que son los objetivos de este abertzalismo violento derrotado, los que
pretenden poner sobre la mesa: territorialidad, etc.
Por eso, en lugar de entrar en ese juego, a mi juicio habría
que plantear un contra Raca-Raca, que se basaría en los siguientes puntos:
1. Los vascos, hartos de 200 años de guerras civiles y
desencuentros violentos, queremos probar lo único que no hemos tenido: una
República indivisible dentro de la República indivisible de España.
2. Para ello, las Diputaciones Forales desaparecen y
transfieren sus competencias a un Gobierno Central. Se reducirá la
administración superando duplicidades. Se potenciarán los municipios y este
citado Gobierno Central Vasco
3. La organización territorial, superadora de estériles
rivalidades se regirá por el mapa de la Euskalmet. Costa, interior y vertiente
mediterránea. La Costa comprenderá toda ella desde los confines de Castro
Urdiales hasta la desembocadura del Bidasoa, estableciéndose acuerdos con
nuestros hermanos y vecinos de la República francesa. Por interior entendemos
el curso medio de los ríos hasta la divisoria de aguas entre el Cantábrico y el
Mediterráneo, Y la Vertiente Mediterránea comprenderá el resto. Además se
constituirán los distritos metropolitanos de Bilbao, Donostialdea,
Pamplona-Iruña y Vitoria-Gasteiz.
4. Habrá un Consejo Regional Vasco, con una única cámara, elegida
por los ciudadanos en cada una de esas circunscripciones, dentro de la
indisoluble República Española, con funciones legislativas. Se propondrá un
grado de proporcionalidad lo más exacto posible con el numero de ciudadanos de
cada circunscripción, al objeto de que se haga real el principio de un
ciudadan@= un voto de igual valor
5. Para la eficacia y justicia en la Acción fiscal del
gobierno y su intervención en la Economía se creará una banca pública que
coordinará sus acciones con el Banco Público Central Europeo.
6. Un Consejo Fiscal y de Cuentas independiente
7. Un Cuerpo de policía: Ertzantza
8. Una Audiencia Regional, con fiscales y jueces de distrito
independientes, elegidos directamente por los ciudadanos de cada uno de ellos
9. Se potenciará al máximo la herramienta informática en las
relaciones de la administración y los administrados, y en las elecciones.
10. Una Escuela primaria, Secundaria, Formación Profesional
y Una Universidad Públicas
11. El Acceso a la cultura, a la educación y a la
participación política directa o a través de partidos de todos los ciudadanos
estará especialmente protegida y garantizada.
12. En el Frontispicio de todas las Ikastolas y Escuelas públicas, habrá un recuerdo hacia las Víctimas del Terrorismo...