martes, 26 de noviembre de 2013

El Relato y el co-relato.



El Relato y el co-relato.

El nacionalismo tiene su relato y su correlato que se resume en la siguiente tesis: ahora que los descarriados chicos de ETA, han abandonado a lucha armada, y desde nuestra posición de centralidad y bajo el patriarcado de Sabino Arana hay que impulsar el nuevo Raca-raca de un nuevo Estatuto…con los arrepentidos que Dios quiere y los integradores en nuestra nebulosa a los que Dios Padre adora…

A este relato, habría que oponerle otros relato, emotivo, racional, mental, imaginario, pedagógico y económico y fiscal, que se resume en los siguientes puntos:

1. A lo largo de la historia de los últimos doscientos años, a los vascos no se les ha dejado integrarnos en una verdadera República unitaria de ciudadanos españoles, cuerpo al que pertenecemos desde la Edad Media, a través de los antiguos reinos de Navarra y Castilla y sus Señoríos de Vizcaya, Tierra de Álava y Noble y Leal, Provincia de Guipúzcoa, que tuvieron en ellos sus fueros como cesión de su soberanía unitaria.
2. Cuando se conformaron las Repúblicas y las monarquías constitucionales, los Españoles sufrimos múltiples impedimentos a la constitución de la nuestra: La Invasión napoleónica, desató la primera constitución unitaria de 1812; luego vinieron las de 1836, 1848, 1868, 1876…Todas ellas bajo el signo de la debilidad de la burguesía liberal para imponerse frente a la antigua nobleza de las manos muertas y el legitimismo carlista. La Primera República fue un episodio fracasado en buena medida por su federalismo que fragmentaba aún más a las débiles fuerzas progresistas y que no contó con las regiones o cantones a los que dio protagonismo, frente a la feroz respuesta del clero y del carlismo y demás monárquicos.
3. Cuando a fines del XIX y principios del XX el anarquismo y el socialismo, en sus diferentes versiones van tomando fuerza, la burguesía fraguó una alianza de hierro con el resto de la Oligarquía en lo que se llamó significativamente La Restauración Borbónica. Se perdieron las últimas colonias y aumentó la desafección de las burguesías periféricas, especialmente de la catalana y la vasca, que veían que sus intereses mercantiles no podrían prosperar en el débil mercado interior español.
4. A ésta le sucedió la dictadura de Primo de Rivera, nuevo intento de modernización sobre bases oligárquicas y sus epígonos de la Dictablanda, etc. Tras de lo cual llegó la Segunda República, que trabajo sobre un país enormemente atrasado y débil impulsando sobre todo la Educación del Pueblo mediante la creación de miles de escuelas y de misiones pedagógicas. Pero desde el mismo 1931, las fuerzas reaccionarias, la oligarquía, el clero y los militares refractarios, conspiraron contra esos impulsos de Libertad y finalmente plantearon la dialéctica de las pistolas y del genocidio de una guerra civil que se planteó para desterrar de España a “la otra España”. Durante la República, se afrontó además los llamados “problema vasco” y “problema catalán” que detrajeron tiempo y esfuerzo para realizar unas labores de modernización que debieron haber contado con un apoyo más unitario.

5. Luego llegaron 40 años de erial cultural, de erradicación de los avances en materia pedagógica y educativa que planteaba la II República. La Represión fue absoluta y brutal, los mejores españoles fueron muertos, presos o exiliados. Luego surgió toda una generación sin memoria, que constituyó la sociología del franquismo, educada entre su simbología y sus consignas en el nacional-catolicismo. El desarrollismo desde los 60 y 70 contribuyó al progreso material pero no al espiritual, cultural y político. Produciéndose expresiones de violencia reflejo de la violencia del Estado franquista a su imagen y semejanza. La cultura en España discurría en las catacumbas de la infracensura o en la de los desterrados y clandestinos.

6. A mediados de los 70, las fuerzas que habían plantado cara al franquismo continuaban siendo una exigua minoría a pesar del activismo de muchos de sus militantes. Y fueron incapaces de forzar una ruptura, ni tan siquiera una vez que el dictador murió en la Cama. Hubo que pactarse un borrón y cuenta nueva con las hegemónicas fuerzas del régimen, que al tiempo darían el testigo a una tibia socialdemocracia modernizadora auspiciada por la socialdemocracia alemana, la más atlantista y por los EE.UU. que trabajaban desde tiempo atrás en las cloacas de los grupúsculos de extrema izquierda, fomentando atentados y acciones  que dificultasen el fortalecimiento de un Partido Comunista fuerte como en Italia.

7. Por otra parte, en este escenario, la ETA había tomado protagonismo desde el 1970, con el Proceso de Burgos y posteriores actuaciones. La rápida secularización del país Vasco, aceleró también la desafección de los carlistas, ambos pilares del Régimen. Esto produjo un proceso de  alquimia que provocó la hibridación de estos ex seminaristas y estudiantes cristianos nacionalistas y carlistas con un marxismo leninismo de catecismo, muy influenciado por los movimientos de liberación nacional que en los años 50 y 60 se imponían en África y Asia, el Caribe y América del Sur. La historia posterior ya la conocemos: acción, reacción, condiciones políticas siempre bajo la amenaza de las armas, terrorismo, cloacas del Estado, y víctimas, centenares de víctimas y una sociedad, la vasca terriblemente fracturada y plural, exiliada interior y exteriormente y traumatizada…
8. En consecuencia, al País Vasco, nunca ha registrado en 200 años una paz real, una convivencia en paz, salvo paréntesis de crecimiento económico que se trasladaba a una aparente normalidad.
9. Los nacionalistas ahora vuelven con el Raca Raca de la necesidad de un nuevo Estatuto político, porque nunca han estado agusto con el que tenemos. Y porque pretenden una nueva vuelta de tuerca, apoyados en la acumulación de fuerzas y de “legitimidad”, con la aparente pacificación de su ala extrema y violenta. Pero la trampa estriba en que son los objetivos de este abertzalismo violento derrotado, los que pretenden poner sobre la mesa: territorialidad, etc.
Por eso, en lugar de entrar en ese juego, a mi juicio habría que plantear un contra Raca-Raca, que se basaría en los siguientes puntos:
1. Los vascos, hartos de 200 años de guerras civiles y desencuentros violentos, queremos probar lo único que no hemos tenido: una República indivisible dentro de la República indivisible de España.
2. Para ello, las Diputaciones Forales desaparecen y transfieren sus competencias a un Gobierno Central. Se reducirá la administración superando duplicidades. Se potenciarán los municipios y este citado Gobierno Central Vasco
3. La organización territorial, superadora de estériles rivalidades se regirá por el mapa de la Euskalmet. Costa, interior y vertiente mediterránea. La Costa comprenderá toda ella desde los confines de Castro Urdiales hasta la desembocadura del Bidasoa, estableciéndose acuerdos con nuestros hermanos y vecinos de la República francesa. Por interior entendemos el curso medio de los ríos hasta la divisoria de aguas entre el Cantábrico y el Mediterráneo, Y la Vertiente Mediterránea comprenderá el resto. Además se constituirán los distritos metropolitanos de Bilbao, Donostialdea, Pamplona-Iruña y Vitoria-Gasteiz. 
4. Habrá un Consejo Regional Vasco, con una única cámara, elegida por los ciudadanos en cada una de esas circunscripciones, dentro de la indisoluble República Española, con funciones legislativas. Se propondrá un grado de proporcionalidad lo más exacto posible con el numero de ciudadanos de cada circunscripción, al objeto de que se haga real el principio de un ciudadan@= un voto de igual valor
5. Para la eficacia y justicia en la Acción fiscal del gobierno y su intervención en la Economía se creará una banca pública que coordinará sus acciones con el Banco Público Central Europeo.
6. Un Consejo Fiscal y de Cuentas independiente
7. Un Cuerpo de policía: Ertzantza
8. Una Audiencia Regional, con fiscales y jueces de distrito independientes, elegidos directamente por los ciudadanos de cada uno de ellos
9. Se potenciará al máximo la herramienta informática en las relaciones de la administración y los administrados, y en las elecciones.
10. Una Escuela primaria, Secundaria, Formación Profesional y Una Universidad Públicas
11. El Acceso a la cultura, a la educación y a la participación política directa o a través de partidos de todos los ciudadanos estará especialmente protegida y garantizada.
12. En el Frontispicio de todas las Ikastolas y Escuelas públicas, habrá un recuerdo hacia las Víctimas del Terrorismo...